jueves, 25 de septiembre de 2008

Dungeon Siege: En el Nombre del Rey - Uwe Boll ataca de nuevo




Dungeon Siege: En el Nombre del Rey
(2007) es la mejor película de Uwe Boll. Antes de que penséis que estoy defendiendo la película, me permito recordaros que este tipo es el "autor" de joyas del cine actual como Alone in the Dark o House of the Dead, películas que no recomendaría ni a mi peor enemigo. Habituado a inspirarse en videojuegos para realizar sus películas, Boll, director alemán de tanto prestigio que incluso tiene una página web que recoge firmas para que nunca vuelva a dirigir (http://www.petitiononline.com/RRH53888/ por si queréis firmar) y llegó a retar a sus críticos más despiados a combates de boxeo. Para aquellos que lo comparan con Ed Wood, deciros que al menos Wood no adaptaba sus películas, surgían directamente de su cerebro friki. Un punto a su favor.

Esta película, que tiene un reparto espectacular (Jason Statham, Burt Reynolds, Ray Liotta, Leelee Sobieski, Claire Forlani, Ron Perlman, Matthew Lillard, Kristanna Loken...), una fotografía pasada por todos los filtros digitales disponibles (pero que cumple con creces) y un diseño de producción muy interesante (para el dinero que debía haber), es una película de Sword & Sorcery correcta. Mala, pero correcta, lo que no se puede decir de sus demás obras (he de reconocer que nunca terminé Alone in The Dark, pero lo de House of the Dead es para arrancarte tu propia pierna mientras la ves y quien pueda/quiera pillará la referencia). Cuenta la historia de un granjero, que responde al sencillo nombre de "Granjero" porque cree que uno acaba convirtiéndose en lo que hace, y que llegará a convertirse en rey después de varias peripecias en un mundo a lo ESDLA, rodeado de personajes vacíos y malvados exagerados y aburridos. Y poco más. Dura dos horas y cuatro minutos, en las que podemos ver a algunos de los actores secundarios más respetados haciendo las peores interpretaciones de su vida (se salva Statham y únicamente porque hoy en día es el actor de acción más en forma, porque lo de Ray Liotta y Matthew Lilard es para colgarlos de los huevos y dejar que se los coman los buitres, aunque sospecho que, sobre todo en el caso del primero, la culpa es de su director), cobrando el cheque y a otra cosa. Desconozco el presupuesto de la película, pero no ha superado los 12 millones de dólares de recaudación a nivel mundial, así que no creo que Boll esté nadando en los beneficios de cinta. Quizás le vaya mejor en DVD, ya que es carne de los antiguos videoclubs, donde con una buena portada y una sinopsis escrita por alguien con más talento que el guionista de esta película, te podías llevar cualquier basura a casa, convencido de que al menos pasarías un buen rato. El tiempo lo dirá, pero no apostéis por ella.

Y, la verdad, nada más que decir. Para aquellos que quieran ver algo interesante (sí, de Boll), les recomiendo que vean los primeros minutos de su nueva película, que al menos desprenden un humor basto y gordo que hará que los americanos pidan la cabeza de este director alemán. Me refiero a Postal y únicamente a sus primeros minutos, lo que Uwe Boll describió como "la primera comedia del 11 de Septiembre". Podéis verlo aquí: Primeros minutos de Postal con subtitulos en castellano (YOUTUBE)

No voy a gastar más tiempo ni espacio en poner la ficha técnica, ni los datos de recaudación, pero, por si acaso alguien los quiere saber, podéis encontrarlos aquí:


VALORACIÓN: 1 UNIDAD APROVECHABLE... más o menos.

Lo peor: El Reparto, desaprovechado hasta decir basta, por no decir que alguno no debería volver a ponerse delante de una cámara o subir a un escenario y limitarse a vender, desde esta película en adelante, recopilaciones de música de los 80 en la teletienda.
Inexplicable: Cómo un tipo como Uwe Boll consigue el dinero para hacer esta película, tener a ése reparto, hacerlo mejor que nunca y aún así sólo fabricar MIERDA.
Positivo: La foto, el diseño de producción y la música, además de las coreografías de lucha, sin duda lo mejor de la película, pero más porque seguro que eran buenos profesionales que supieron hacer su trabajo que porque sean realmente destacables. Y Statham, que cumple con su papel de estrella de acción, aunque el pobre vaya de Boll a Paul WS Anderson.

lunes, 22 de septiembre de 2008

Viaje al Centro de la Tierra 3D - Primeros pasos




Esta película está pensada y creada para ser vista en 3 dimensiones, única y exclusivamente. Las personas que hayan ido a verla en dos dimensiones habrán pensado que es la mierda más infumable de la historia del cine de aventuras. Incluso después de verla en 3D alguno de mis amigos pensaba que había perdido el tiempo. No les culpo. sin embargo, merece la pena distanciarse un poco de la película en sí para ver lo que es realmente interesante de este proyecto.

En la época en la que podemos ver películas en nuestra casa con una calidad casi comparable a la de las salas, un proyecto como este representa una evolución muy importante. Desde el cine sonoro, las salas habían sufrido pocas mejoras, teniendo que esperar a los años 80 para encontrarnos con cambios en el sistema de sonido, gracias a las nuevas técnicas digitales. Pero en el caso de la imagen, el único cambio en toda la historia que realmente ha tenido éxito es el paso definitivo al color. Todos aquellos experimentos de pantallas más grandes, varias pantallas, o un sistema de olores que nunca funcionó, acabaron por abandonarse (aunque algunos sirvieron como base para continuar las mejoras). Incluso los primeros intentos en 3D sólo habían conseguido marear al público, no mejorar el espectáculo en sí. Con la llegada del IMAX y la posibilidad de ver imágenes en 3D reales, las cosas cambiaron un poco, per sólo un poco, hasta que los productores norteamericanos, quién si no, empezaron a apostar por el sistema de las 3 Dimensiones. El año pasado tuvimos la suerte de poder ver Beowulf en ése formato, habiendo sido creada, además, directamente en 3D. La verdad es que la película me gustó, me pareció correcta y a ratos espectacular, pero con lo que salí realemente emocionado fue con el nuevo sistema. En el caso de Viaje al Centro de la Tierra la sensación fue similar, aunque con peores resultados. En este caso estamos ante una película de imagen real, grabada, pensada y proyectada en 3D, no en una película de animación, como el caso anterior.

El éxito en taquilla de ambas cintas, sobre todo la que nos ocupa, hace pensar que veremos muchas más en este formato. Hace tan sólo un año, la cantidad de salas 3D en USA no llegaba al millar, pero para e estreno de la película protagonizada y producida por Brendan Frases, pudo disfrutar de un parque de 1400 salas en el país de las barras y estrellas. El resultado, casi 100 millones de dólares sólo en esas salas, sin contar lo que ha recaudado en su versión "capada" en 2D, hacen que éste sea uno de los mejores años en la carrera de Fraser (su otro éxito del año es la conservadora, por el poco riesgo, La Momia 3: La Tumba del emperador Dragón, que ha tenido unas recaudaciones espectaculares en el mercado internacional) y, presumiblemente, veremos continuaciones de los viajes del paleogeólogo en busca de la Atlántida. Esto, en sí mismo, representa que hay una nueva forma de atraer al público a las salas, justo cuando las recaudaciones y el interés del público decaían en todo el mundo (salvo con excepciones como la maravillosa El Caballero Oscuro), además de ser el único formato cinematográfico imposible (por e momento) de piratear (me refiero a la posibilidad de verla en 3D en tu casa, no de verla en 2D), lo que hace que veamos cómo los productores estadounidenses sí piensan en cómo adaptarse a los nuevos tiempos, lo que no puede decirse de los nuestros, empeñados en culpar a la piratería de la falta de interés del público y no hacer nada por mejorar la percepción de los españoles sobre su cine. De nuevo, el público no importa para nuestra pequeña industria. El primer error de una larga lista.

La película en sí es apropiada para los niños, claramente su público objetivo, no tanto para aquellos que tengan inquietudes diferentes, buscando historias y personajes más desarrollados. Es un espectáculo lleno de escenas de aventuras, saltos, peligros y efectos especiales que hará felices a los más pequeños. No hay casi desarrollo de personajes y la trama avanza con una rapidez increíble, sin tiempo para pararse a pensar, con su ajustada duración (en este formato sería imposible aguantar una película de 3 horas, al menos de momento, ya que no estamos preparados para este lenguaje).

Pero la película es un éxito, guste o no al público adulto, y representa los primeros pasos de una nueva técnica que parece afianzarse, poco a poco, y que con las mejoras en las salas de todo el mundo (ya veremos si también en España), cada vez tendrá más posibilidades de expansión y de disfrute. Obviamente no tendría sentido ver una película de Woody Allen en este formato, ya que no busca la espectacularidad, pero los grandes blockbusters americanos pueden tener un nuevo ímpetu comercial gracias a las 3D. Imaginaos ver las secuencias más espectaculares de películas como Transformes, Starship Troopers o La Guerra de las Galaxias en este formato, por no hablar del desembarco de Salvar al Soldado Ryan, donde el cuidadísimo sonido te hace oír pasar las balas a tu alrededor. Aunque no os gusten esas películas, sin duda sería... otra cosa.

Exiten rumores sobre que películas como El Hobbit de Del Toro o el Tintín que preparan Spielberg y Jackson se podrán ver en este formato, lo que me parece estimulante, la verdad.

De nuevo, el cine da los primeros pasos en un nuevo lenguaje y formato de imágen, añadiendo otra posibilidad a la expresión "espectáculo cinematográfico". Ya era hora, después de casi 80 años.

VALORACIÓN EN 3D: 3 UNIDADES APROVECHABLES
VALORACIÓN EN 2D: Ni lo intentéis.

martes, 9 de septiembre de 2008

Zohan (2008). Comedia con pelos.


Zohan: Quiero dejar el ejército... La guerra no se acaba nunca.
Madre: Llevan 2000 años peleando, tendrá que acabar pronto.




Teniendo en cuenta el esfuerzo que han hecho en el doblaje para diferenciar los variopintos acentos de los personajes de esta película, supongo que en la versión original este es un punto a tener en cuenta y que forma parte del estilo de la cinta. Pero la he visto doblada, así que no podré determinar si las actuaciones son más de lo que parecen en un principio: Adam Sandler como Zohan, con un doblaje al que cuesta adaptarse (aunque más por determinadas traducciones de comentarios muy rebuscadas que por la labor de José Posada) y John Turturro como Fantasma, su rival, ambos tan excesivos e histriónicos como pide una buena comedia de sal gorda. Los secundarios, entre los que destaca Rob Schneider como una antigua víctima de Zohan que ahora se gana la vida como taxista y su grupo de amigos.
En fin, la verdad es que me esperaba una comedia divertida y simple, que es lo que es, pero por el tema que trata surgen momentos en que la comedia se convierte en algo arriesgado, aunque sin llegar a mostrar caricaturas de Mahoma en formato panorámico. Últimamente han empezado a desarrollarse cintas cuya temática es las diferencias raciales para inmigrantes de primera o segunda generación, cuyos enlaces culturales con su familia de origen se limitan a su familia, los recuerdos de éstos y ciertos tópicos que sufren por culpa de los blanquitos ricos. El mejor exponente de este microgénero es la saga de Harold y Kumar (en España, gracias a nuestros distribuidores por estos títulos, Dos Colgados muy fumados (2004) y Dos colgados muy fumados: fuga de Guantánamo, de este mismo año), películas que siempre pierden con el doblaje, al desahacernos de los diferentes acentos y ritmos de las minorías que aparecen en la cinta. En Zohan, sin embargo, han intentado trasladar al doblaje esta variedad de acentos. Cosas de tener presupuesto. Uno de los aspectos más interesantes de este microgénero es que siempre está ligado al mundo de la comedia, y cuanto más exagerada y absurda, mejor, pues así evitamos herir las sensibilidades de nadie en particular y hacer que todos se rían, vengan de donde vengan. Esto, unido al hecho de que es un género nuevo, dentro de EEUU, que no podía aparecer en ninguna época anterior, hace que, además de darte hora y media de risas, ofrezcan dobles lecturas muy interesantes.
En Zohan nos encontramos con los mejores momentos en su comienzo y presentación, con una escena de persecución de Zohan a El Fantasma realmente divertida y desfasada (genial el muñeco que hace Zohan con las piedras que le tiran los niños palestinos y cómo éstos se emocionan, la escena en la que Zohan y Fantasma compiten por ver quién es más duro aguantando los mordiscos de un pez, cómo Zohan alcanza a nado al fantasma que va en una moto acuática...) y se mantienen durante prácticamente toda la película, con altibajos y gamberradas varias que elevan el tono cerdo de la cinta... hasta el final, en el que se les viene encima todo el peso de haber hecho una película sobre israelíes y palestinos en EEUU, donde todos los finales son felices y todas las diferencias se pueden arreglar. Dicho y hecho, partiendo de la base de que debía ser una película arriesgada para atraer al público, pero al mismo tiempo dejar contentas a todas las partes, el desarrollo de Zohan va de más a menos en cuanto a sal gorda se refiere y acaba en un dulzor muy americano, de esos que repiten por la noche.

Datos, fichas y Valoración en unidades aprovechables.

Título Original: You Don't Mess with the Zohan (2008)
Estudio/Productora:
Producción: Jack Giarraputo, Adam Sandler.
Dirección: Dennis Dugan
Guión: Robert Smigel, Adam Sandler y Judd Apatow.
Fotografía: Michael Barrett
Música: Rupert Gregson-Williams
Dirección Artística: Perry Andelin Blake
Montaje: Tom Costain
Reparto seleccionado: Adam Sandler (Zohan), John Turturro (El Fantasma), Rob Schnneider (Salim), Emmanuelle Chriqui (Dalia).

Datos de la Recaudación, a día 090908: 129,268,885 $
Recaudado en EEUU: 100,018,837
Recaudado fuera de EEUU: 29,250,048

Presupuesto (sin publicidad): 90 millones de dolares.
¿Éxito o fracaso? Teniendo en cuenta que ha superado los 100 millones de recaudación en EEUU, esto supone un nuevo éxito de taquilla para Sandler, que mueve a muchos menos espectadores a las salas fuera de su país de origen. Así que, un éxito en EEUU, un fracaso moderado en el resto del mundo, de momento, claro, que seguro que quedan muchos países por estrenarla.

VALORACIÓN: 3 UNIDADES APROVECHABLES
+ Valorable: los chistes de sal gorda sobre judíos y palestinos que se lanzan los unos a los otros, sobre todo antes del final.
+ Bestia: Chris Rock, haciendo un cameo como taxista y contando una historia sobre su familia y las hamburguesas.
- Utilizable: La conclusión final, totalmente azucarada y falsa, con el hermanamiento de palestinos y judíos para evitar la implantación de un centro comercial (sic).

Dias de Cine (2007). Metacine español.


Acabo de ver esta película, aunque se estrenara el año pasado. El equipo creativo de Dias de Fútbol (2003), se reúne de nuevo, ahora con más presupuesto y ambiciones. Su objetivo es retratar a la industria del cine español en los momentos posteriores a la muerte de Franco, es decir, en pleno Destape.
La película tiene como trama el rodaje y posterior estreno de una película de bajo presupuesto, lo que la emparenta, en cierto sentido, con el espíritu de la maravillosa Ed Wood (1994), pero, era de esperar, bajo el prisma del cine español actula. Y esto no lo digo a la ligera. no creo que se puedan encontrar fallos garrafales en cuanto a la ambientación y el vestuario, por no hablar de que el tema de un cine tan complicado de llevar a buen término siempre puede dar buenas historias. Pero el problema de Días de Cine es que, por mucho que pretenda evocar momentos históricos pasados, habla del cine español en la actualidad en los momentos más reveladores de la película. Y el tema del cine español es un tema complicado y espinoso...
Obviamente, una comedia de los creadores de la exitosa Días de fútbol, podría atraer al público a las salas, incluso a pesar de tratarse de una película española sobre el cine español. Atrajo a más de 100.000 espectadores a las salas, logrando superar el medio millón de euros de recaudación. Estas cifras, que a priori pueden sonar bien, reflejan el excaso éxito de una película que acabó siendo la número 29 en el ránking de películas españolas más taquilleras de su año, 2007. A años luz de las recaudaciones obtenidas por los dos grandes éxitos del cine español del pasado año, El Orfanato (con más de 24 millones de euros y 4 millones de espectadores) y REC (con algo más de 7 millones y 1.300.000 espectadores), pero también a años luz de lo recaudado en ese año, es decir, sólo en 2007, por una película de éxito estrenada el 10 de octubre de 2006. Me refiero a El Laberinto del Fauno (2006), que acumuló más de un millón y medio de euros y 300.000 espectadores en los primeros meses de 2007. Así pues estamos hablando de un nuevo fracaso comercial del cine español. Es probable que compitiera en cuanto a la atención de los espectadores, con películas estadounidenses de gran potencial comercial, que la piratería la perjudicara y que la mala imagen del cine español entre los jóvenes les hiciera huir de a una película basada en los 70, por mucha comedia que fuera. Con todo esto quiero decir que las aspiraciones comerciales de las películas españolas no son tan valorados como deberían ser. Es cierto que es una industria pequeña y que no puede destinar tanto dinero a publicidad como los blockbusters norteamericanos, pero debería empezarse a tener en cuenta los gustos del espectador para balancear un poco la imagen de nuestro cine. Hay muchos problemas y dificultades en el camino de reflotar al cine español, y los trataré en un artículo aparte, pero la primera piedra es pensar en lo que quiere ver el público. Un poquito.
Días de cine representa uno de los sectores más aplaudidos dentro del cine español, el género de la comedia, y, como comedia, funciona a medio gas. Durante la primera mitad de la película, entre presentaciones de personajes y los comienzos del rodaje, la comedia tiene sus mejores momentos, pero a partir de la mitad, más o menos, nos encontramos más con un drama cómico que con una comedia con todas las letras. Hay grandes momentos y grandes escenas (como el funeral del antiguo jefazo de la censura y lo que ocurre a continuación o la breve aparición de Ramón Barea), pero no los suficientes para ganarse el título de comedia. Entre los momentos de drama también hay buenos momentos (el productor durmiendo con su hermano evadido de prisión en el sofá de su oficina, la última aparición de Malena Alterio), pero es inevitable pensar en si el sabor que deja en los espectadores no sería muy diferente si el caudal del ritmo de comedia fuera de menos a más, en lugar de más a menos.
En el reparto destaca Alberto San Juan como el director primerizo que es manipulado para tergiversar su guión y su visión de la historia, y cuya interpretación no es constante (tiene momentos muy buenos y otros en los que no logra conectar con lo que está pasando). Nathalie Poza está más equilibrada, en un personaje un poco desagradecido, y siempre acompañada por un excesivo Fernando Tejero en su papel de séquito afeminado. Brilla, como casi siempre, Miguel Rellán, en el papel del productor de la película, un papel muy agradecido y apropiado para el actor, consiguiendo grandes momentos de drama sin decir nada y buenos momentos de comedia. Otro que alcanza grandes puntos, hasta que el personaje resulta excesivamente presente, es Andrés Lima, como el nuevo caudillo de la censura. El resto de secundarios, entre los que se encuentran Luis Bermejo en un papel francamente extraño, Diego Martín como un (correcto) ayudante de dirección primerizo con aspiraciones de más, Roberto Álamo en múltiples papeles, mejor en unos que en otros, y Malena Alterio en el personaje dramático de la película (no le han puesto ni un sólo chiste a la mujer), casi desaparecido y bastante desagradecido para una buena actriz.
Interesante, al menos en cuanto al cine español se refiere, es la secuencia final (ojo, no sigas leyendo si no has visto la película, pasa directamente al último párrafo) en la que se produce el estreno de la película de ciencia-ficción-musical-con desnudos que resulta del caótico rodaje. A pesar de ser la bazofia más infumable que se ha visto bajo una carpa en el territorio ibérico, al público, mira por dónde, le gusta. Todos están contentos, el productor porque puede hacer otra película, el distribuidor porque se va a forrar, los actores porque reciben los aplausos y piropos (fuera de tono o no) de los espectadores, todos... menos el director. La mente creativa y supuestamente artística de la película hace lo que cualquier artista que se precie haría: salir huyendo de esas oportunidades de hacer nuevas pelis malas, del dinero que puedan hacer y de los aplausos de un público que se ha divertido. Sale corriendo como alma que lleva el diablo, porque se juega su integridad y su honor de artista comprometido. Es una metáfora doble del cine español, lo que piensan de ellos mismos y de lo que hacen con respecto al público y sus apetencias.
Película inconstante, que, no obstante, disfruté un poco más que la anterior, Días de Fútbol (2003, de la que apenas recuerdo a Ernesto Alterio), de ritmo MUY inconstante, técnicamente correcta pero no apabullante, y que no quedará fijada durante mucho tiempo en mi memoria. Eso sí, tampoco ha sido un tiempo desperdiciado.
Datos, Fichas y Valoración en Unidades aprovechables.
Días de Cine (2007)
Estudio/Productora: Telespan 2000, Estudios Picasso y Lazona Films. distribuída por Buena Vista International Spain.
Producción: Tomás Cimadevilla
Dirección: David Serrano.
Guión: David Serrano, con la colaboración de Antonio San Juan (sale algo así en los créditos)
Música: Miguel Malla.
Fotografía: Kiko de la Rica.
Dirección artística: Luis Ramírez.
Montaje: Nacho Ruiz Capillas.
Reparto Seleccionado: Alberto San Juan (Federico), Nathalie Poza (Silvia Conde), Miguel Rellán (José María Culebras), Fernando Tejero (Fino), Luis Bermejo, Diego Martín, Roberto Álamo, Andrés Lima (Marcial Pérez Bustamante), Gerardo Malla (Francisco, AKA "Paco"), Malena Alterio y un pequeño cameo de Ramón Barea.
Datos de la Recaudación en 2007: 554.323,93 € y 108.267 espectadores.
Presupuesto: Desconocido.
¿Éxito o fracaso? Teniendo en cuenta el puesto 29 en el año de su estreno y las aspiraciones comerciales de la cinta, considero que es un fracaso comercial en toda regla.
Quería dar las gracias a LABUTACA.COM por permitirme encontrar los datos que me faltaban sin tener que poner de nuevo la peli (la ficha de IMDB está bastante incompleta) y que me permitieron incluir los nombres del músico, el montador y el director artístico.
VALORACIÓN: 3 UNIDADES APROVECHABLES.
+ Aprovechable: Miguel Rellán y lo poco de Malena Alterio que podemos ver.
- Desaprovechado: El potencial de comedia coral a la española que se diluye entre el drama de cada personaje (y del país, claro).
- Inconstante: El ritmo y el entretenimiento de la película.

lunes, 8 de septiembre de 2008

Nolan brilla con El Caballero Oscuro (2008)




La gran expectación que había levantado esta película, antes incluso de la muerte de Heath Ledger, hacía esperar un éxito de taquilla considerable, superando a la primera entrega de la nueva serie dirigida por Christopher Nolan. Instantes después del final del primer pase en España de Batman Begins (2005), los foros de Internet ya bullían con conversaciones sobre ¿quién debería ser el Joker? Casi nadie acertó y, una vez que se hizo pública la elección de Heath Ledger, la mayoría de comentarios fueron negativos, pero ahora, estrenada la película y con tiempo suficiente para valorarla más ampliamente, apenas hay voces que digan algo negativo sobre el trabajo del actor australiano. Es cierto que el impacto mediático de su fallecimiento el pasado 22 de enero fue enorme y, para qué vamos a negarlo, supuso un impulso todavía mayor para la carrera comercial de la película, pero su encarnación del Joker es sencillamente apabullante. Destaco esto en primer término por la sencilla razón de que es la noticia estrella relacionada con la película, pero no porque crea que es su única virtud.

Christopher Nolan ha conseguido, con pocas películas, colocarse como uno de los directores más importantes del momento. Su visión realista de la saga de Batman ha sido uno de los soplos de aire fresco más celebrados en el mercado, cada vez más saturado, de las películas de superhéroes. Cuando el impacto de Spider-Man empezaba a decaer en cuanto a la expectación de los fans (no así por el público, eso sí, ya que recaudó casi 900 millones $ en todo el mundo), Nolan ha conseguido hacer que su película se colocara como la “mejor de la historia” según los usuarios de IMDB (aunque las cosas se han normalizado, aún está entre las cinco primeras), se ha acercado (un poco, pero más que nadie) a las recaudaciones de la inalcanzable Titanic (1997) y, sobre todo, ha hecho que nos olvidemos por completo de su gran rival en el verano, el sexagenario Indiana Jones, ¿quién se acuerda de él a estas alturas del año?, y de todos los demás superhéroes que se han ido descolgando por las carteleras (léase Iron Man, Hulk…). Utilizando términos de Hollywood, Nolan ha hecho un golpe maestro.

Ahora bien, ¿es para tanto? ¿Es tan buena la película o estamos tan acostumbrados a ver obras menores en este sector que cuando vemos una buena película la elevamos a los altares? Hoy en día la expresión Obra Maestra se utiliza tanto y tan mal como te quiero, y los fans son cada vez más fanáticos y más radicales (quizás porque empiezan antes y tienen toda la información desde el principio, pero ésa es otra historia). ¿Dentro de unos meses nos olvidaremos de ésta película para cantar las alabanzas de, por ejemplo, Watchmen y nunca volveremos a hablar de ella? No lo creo. Es más, pienso que Nolan está haciendo un trabajo increíble, dando consistencia a una saga que hasta ahora había sido (bien) explotada como cuento gótico por Burton y (desastrosamente explotada) como… esto… como definirlo… fantasía homoerótica y pastillera por Joel Schumacher. Más allá de ser un simple personaje atormentado por la venganza, pero que apenas tiene tiempo para reflexionar, entre pelea y pelea, sentado en un sillón frente a una chimenea y esperando a que Alfred le traiga un coñac o un modelo cabezahueca (tanto da Kilmer que Clooney) recitador de diálogos pretenciosamente absurdos sobre la familia, el Bruce Wayne de esta saga, no sólo se plantea su situación y lo comparte, sino que afecta a todos los demás personajes, buenos, villanos y ciudadanos de a pie, en su cruzada por las oscuras calles de Gotham. La presencia de la ciudad en esta película y el mundo que ha creado no se quedan en un diseño de producción apabullante, sino que son el marco perfecto para la aparición de esta gente. En las anteriores películas de Batman, los villanos aparecen allí simplemente porque así debe de ser (con la posible excepción de la primera de Burton, en la que los orígenes y destinos del héroe y el villano se entrelazan constantemente). Pero más allá de simplemente atraer a los villanos excéntricos de turno a su ciudad, como haría cualquier otro superhéroe, es la aparición de un justiciero la que desencadena todo lo demás y, por una vez, todo lo demás es tanto o más interesante que Batman contra los malos. El personaje de Harvey Dent, el caballero blanco de Gotham, es, junto con Gordon y, por supuesto, el Joker, lo más interesante de la película. Son las acciones de estos personajes las que definen la película y su mensaje, que lo tiene, no Batman. Se podría decir que además de ser la primera película que no lleva el nombre de Batman en el título, es la primera que muestra al hombre murciélago como un elemento más, incluso menos relevante para el episodio concreto que los otros. Es posible que el mensaje que quiere dar Nolan con respecto al mundo real sea el que da la primera bailarina del ballet ruso que aparece en la película y que viene a ser algo así como que “se necesitan héroes justos y elegidos por sus cualidades, no vigilantes y justicieros que se toman la justicia por su mano”, pero al mismo tiempo, da un aviso, cuando Gordon dice que “Batman no es el héroe que deberíamos tener, pero sí el que nos merecemos”.

En cuanto a hacer una crítica de cada uno de los aspectos técnicos del rodaje, la verdad es que no hay ninguna mancha, nada se sale del patrón marcado hábilmente por Nolan. La secuela de Batman Begins (2005), es una película intensa, con un ritmo frenético a pesar de tener bastante más secuencias de diálogo que de acción (y teniendo en cuenta la visión de Nolan es un completo acierto), lo que no hace que éstas últimas no sean espectaculares (sobre todo la persecución al furgón de la policía), con un reparto ESPECTACULAR e interpretaciones memorables, una cámara en mano que no marea y una música intensa, casi siempre presente, pero alejada de las composiciones reconocibles. Hay que destacar que en los efectos especiales de la película, que los tiene y muchos, no sólo no se abusa de las CGI, sino que la mayor parte de lo que vemos es real (y el ordenador se utiliza después para eliminar cables, grúas, etc.) o tiene efectos de maquetas y superposición de capas muy logrados. En ningún momento pensé el últimamente tan habitual ¡cómo canta eso! La decisión de que esto sea así viene desde la primera película y es responsable de los elevados presupuestos de ambas cintas. Es un método que se está empezando a extender, sobre todo en cintas de acción ambientadas en el mundo actual (o cercano), para distanciarse de las películas de fantasía o ciencia-ficción cuyas escenas de acción más espectaculares están dominadas por imágenes generadas por ordenador. Otro ejemplo de esta misma técnica lo pudimos ver en La Jungla 4.0 (Live free or die hard, 2007).

En resumen, una de las mejores películas del año, que no merece la pena ver doblada al castellano (y no sólo por Ledger), y un paso de gigante de Nolan dentro de la industria, hasta el punto de que, probablemente va a afectar a otras películas y sagas como la de Superman, que se reinventará de forma más seria y realista, según fuentes no oficiales y rumores varios (por el momento). Al fin y al cabo esto es habitual en Hollywood.

La pregunta que suscita es… ¿quién será el siguiente villano y, sobre todo, cómo lo reinventarán/incorporarán dentro de la visión de Nolan? ¿Enigma?, ¿Catwoman?, ¿Pingüino?, ¿Hiedra Venenosa?, ¿Bane?, ¿Cara de Barro?, ¿el Ventrilocuo y Caracortada? ¿Sombrerero Loco?, ¿Mr. Freeze?, ¿o Arlequín volviendo para vengarse? ¿Y quién lo interpretará? Respuestas a ésas y muchas más preguntas nuevas en tu foro de cine habitual.


Datos, fichas y Valoración en Unidades Aprovechables

Título Original: The Dark Knight (2008)
Distribuidora/Estudio: Warner Bros, Legendary Pictures, DC Comics.
Producción: Christopher Nolan, Charles Roven, Emma Thomas.
Dirección: Christopher Nolan
Guión: Christopher y Jonathan Nolan
Música: James Newton Howard y Hans Zimmer

Fotografía: Wally Pfister
Dir. Artística: Nathan Crowley
Sonido: Richard King
Montaje: Lee Smith
Reparto Seleccionado: Christian Bale (Bruce Wayne/Batman), Heath Ledger (Joker), Aaron Eckhart (Harvey Dent/Dos Caras), Gary Oldman (Gordon), Morgan Freeman (Fox), Maggie Gyllenhaal (Rachel), Michael Caine (Alfred).

Datos de la recaudación a día 08/09/08: 949,398,000$
Recaudado fuera de EEUU: 437,200,000$ (46.1%)
Recaudado en EEUU: 512,198,000$ (53.9%)
Presupuesto (sin gastos de publicidad): 185 millones $
¿Éxito o fracaso? El segundo mayor éxito de la historia en la taquilla norteamericana y el séptimo a nivel mundial.
Fuente: BoxOfficeMojo

Valoración: 6 Unidades Aprovechables.
+ Positivo: El aire fresco que trae esta visión realista de un mundo de fantasía en su segunda entrega, cuando las presentaciones se han terminado. También el desarrollo y profundidad de casi todos sus personajes.
+ Remarcable: Heath Ledger, por supuesto, junto con el resto del reparto.
- Inservible: Verla doblada.

Harryhausen.
El Caballero Oscuro (2008)

La gran expectación que había levantado esta película, antes incluso de la muerte de Heath Ledger, hacía esperar un éxito de taquilla considerable, superando a la primera entrega de la nueva serie dirigida por Christopher Nolan. Instantes después del final del primer pase en España de Batman Begins (2005), los foros de Internet ya bullían con conversaciones sobre ¿quién debería ser el Joker? Casi nadie acertó y, una vez que se hizo pública la elección de Heath Ledger, la mayoría de comentarios fueron negativos, pero ahora, estrenada la película y con tiempo suficiente para valorarla más ampliamente, apenas hay voces que digan algo negativo sobre el trabajo del actor australiano. Es cierto que el impacto mediático de su fallecimiento el pasado 22 de enero fue enorme y, para qué vamos a negarlo, supuso un impulso todavía mayor para la carrera comercial de la película, pero su encarnación del Joker es sencillamente apabullante. Destaco esto en primer término por la sencilla razón de que es la noticia estrella relacionada con la película, pero no porque crea que es su única virtud.

Christopher Nolan ha conseguido, con pocas películas, colocarse como uno de los directores más importantes del momento. Su visión realista de la saga de Batman ha sido uno de los soplos de aire fresco más celebrados en el mercado, cada vez más saturado, de las películas de superhéroes. Cuando el impacto de Spider-Man empezaba a decaer en cuanto a la expectación de los fans (no así por el público, eso sí, ya que recaudó casi 900 millones $ en todo el mundo), Nolan ha conseguido hacer que su película se colocara como la “mejor de la historia” según los usuarios de IMDB (aunque las cosas se han normalizado, aún está entre las cinco primeras), se ha acercado (un poco, pero más que nadie) a las recaudaciones de la inalcanzable Titanic (1997) y, sobre todo, ha hecho que nos olvidemos por completo de su gran rival en el verano, el sexagenario Indiana Jones, ¿quién se acuerda de él a estas alturas del año?, y de todos los demás superhéroes que se han ido descolgando por las carteleras (léase Iron Man, Hulk…). Utilizando términos de Hollywood, Nolan ha hecho un golpe maestro.

Ahora bien, ¿es para tanto? ¿Es tan buena la película o estamos tan acostumbrados a ver obras menores en este sector que cuando vemos una buena película la elevamos a los altares? Hoy en día la expresión Obra Maestra se utiliza tanto y tan mal como te quiero, y los fans son cada vez más fanáticos y más radicales (quizás porque empiezan antes y tienen toda la información desde el principio, pero ésa es otra historia). ¿Dentro de unos meses nos olvidaremos de ésta película para cantar las alabanzas de, por ejemplo, Watchmen y nunca volveremos a hablar de ella? No lo creo. Es más, pienso que Nolan está haciendo un trabajo increíble, dando consistencia a una saga que hasta ahora había sido (bien) explotada como cuento gótico por Burton y (desastrosamente explotada) como… esto… como definirlo… fantasía homoerótica y pastillera por Joel Schumacher. Más allá de ser un simple personaje atormentado por la venganza, pero que apenas tiene tiempo para reflexionar, entre pelea y pelea, sentado en un sillón frente a una chimenea y esperando a que Alfred le traiga un coñac o un modelo cabezahueca (tanto da Kilmer que Clooney) recitador de diálogos pretenciosamente absurdos sobre la familia, el Bruce Wayne de esta saga, no sólo se plantea su situación y lo comparte, sino que afecta a todos los demás personajes, buenos, villanos y ciudadanos de a pie, en su cruzada por las oscuras calles de Gotham. La presencia de la ciudad en esta película y el mundo que ha creado no se quedan en un diseño de producción apabullante, sino que son el marco perfecto para la aparición de esta gente. En las anteriores películas de Batman, los villanos aparecen allí simplemente porque así debe de ser (con la posible excepción de la primera de Burton, en la que los orígenes y destinos del héroe y el villano se entrelazan constantemente). Pero más allá de simplemente atraer a los villanos excéntricos de turno a su ciudad, como haría cualquier otro superhéroe, es la aparición de un justiciero la que desencadena todo lo demás y, por una vez, todo lo demás es tanto o más interesante que Batman contra los malos. El personaje de Harvey Dent, el caballero blanco de Gotham, es, junto con Gordon y, por supuesto, el Joker, lo más interesante de la película. Son las acciones de estos personajes las que definen la película y su mensaje, que lo tiene, no Batman. Se podría decir que además de ser la primera película que no lleva el nombre de Batman en el título, es la primera que muestra al hombre murciélago como un elemento más, incluso menos relevante para el episodio concreto que los otros. Es posible que el mensaje que quiere dar Nolan con respecto al mundo real sea el que da la primera bailarina del ballet ruso que aparece en la película y que viene a ser algo así como que “se necesitan héroes justos y elegidos por sus cualidades, no vigilantes y justicieros que se toman la justicia por su mano”, pero al mismo tiempo, da un aviso, cuando Gordon dice que “Batman no es el héroe que deberíamos tener, pero sí el que nos merecemos”.

En cuanto a hacer una crítica de cada uno de los aspectos técnicos del rodaje, la verdad es que no hay ninguna mancha, nada se sale del patrón marcado hábilmente por Nolan. La secuela de Batman Begins (2005), es una película intensa, con un ritmo frenético a pesar de tener bastante más secuencias de diálogo que de acción (y teniendo en cuenta la visión de Nolan es un completo acierto), lo que no hace que éstas últimas no sean espectaculares (sobre todo la persecución al furgón de la policía), con un reparto ESPECTACULAR e interpretaciones memorables, una cámara en mano que no marea y una música intensa, casi siempre presente, pero alejada de las composiciones reconocibles. Hay que destacar que en los efectos especiales de la película, que los tiene y muchos, no sólo no se abusa de las CGI, sino que la mayor parte de lo que vemos es real (y el ordenador se utiliza después para eliminar cables, grúas, etc.) o tiene efectos de maquetas y superposición de capas muy logrados. En ningún momento pensé el últimamente tan habitual ¡cómo canta eso! La decisión de que esto sea así viene desde la primera película y es responsable de los elevados presupuestos de ambas cintas. Es un método que se está empezando a extender, sobre todo en cintas de acción ambientadas en el mundo actual (o cercano), para distanciarse de las películas de fantasía o ciencia-ficción cuyas escenas de acción más espectaculares están dominadas por imágenes generadas por ordenador. Otro ejemplo de esta misma técnica lo pudimos ver en La Jungla 4.0 (Live free or die hard, 2007).

En resumen, una de las mejores películas del año, que no merece la pena ver doblada al castellano (y no sólo por Ledger), y un paso de gigante de Nolan dentro de la industria, hasta el punto de que, probablemente va a afectar a otras películas y sagas como la de Superman, que se reinventará de forma más seria y realista, según fuentes no oficiales y rumores varios (por el momento). Al fin y al cabo esto es habitual en Hollywood.

La pregunta que suscita es… ¿quién será el siguiente villano y, sobre todo, cómo lo reinventarán/incorporarán dentro de la visión de Nolan? ¿Enigma?, ¿Catwoman?, ¿Pingüino?, ¿Hiedra Venenosa?, ¿Bane?, ¿Cara de Barro?, ¿el Ventrilocuo y Caracortada? ¿Sombrerero Loco?, ¿Mr. Freeze?, ¿o Arlequín volviendo para vengarse? ¿Y quién lo interpretará? Respuestas a ésas y muchas más preguntas nuevas en tu foro de cine habitual.


Título Original: The Dark Knight (2008)
Distribuidora/Estudio: Warner Bros, Legendary Pictures, DC Comics.
Producción: Christopher Nolan, Charles Roven, Emma Thomas. Sonido: Richard King
Dirección: Christopher Nolan Dir. Artística: Nathan Crowley
Guión: Christopher y Jonathan Nolan SFX: Chris Corbould (supervisor)
Música: James Newton Howard y Hans Zimmer
Fotografía: Wally Pfister
Montaje: Lee Smith
Reparto Seleccionado: Christian Bale (Bruce Wayne/Batman), Heath Ledger (Joker), Aaron Eckhart (Harvey Dent/Dos Caras), Gary Oldman (Gordon), Morgan Freeman (Fox), Maggie Gyllenhaal (Rachel), Michael Caine (Alfred).

Datos de la recaudación a día 08/09/08: 949,398,000$
Recaudado fuera de EEUU: 437,200,000$ (46.1%) Recaudado en EEUU: 512,198,000$ (53.9%)
Presupuesto (sin gastos de publicidad): 185 millones $
El segundo mayor éxito de la historia en la taquilla norteamericana y el séptimo a nivel mundial.
Fuente: http://www.boxofficemojo.com/movies/?id=darkknight.htm


Valoración: 6 Unidades Aprovechables.
+ Positivo: El aire fresco que trae esta visión realista de un mundo de fantasía en su segunda entrega, cuando las presentaciones se han terminado. También el desarrollo y profundidad de casi todos sus personajes.
+ Remarcable: Heath Ledger, por supuesto, junto con el resto del reparto.

- Inservible: Verla doblada.

Harryhausen.

domingo, 7 de septiembre de 2008

Presentación

Bienvenidos a mi Blog.

El uso más extendido que le daré será el de publicar mis críticas de las películas que vaya viendo, pero también lo usaré para el desahogo personal, de vez en cuando...

El título del blog hace referencia a un método para escribir guiones utilizado por Kubrick, que pensaba que necesitabas "6 unidades aprovechables" (o escenas clave) para forjar la base de una película y que, una vez que tenías éstas, las demás secuencias y escenas vendrían rodadas. Así que utilizaré un sistema de 6 Unidades Aprovechables para valorar las películas, cuantas más tenga una película mejor opinión tendré de ella.

He de decir que el criterio para seleccionar las películas que critico estará únicamente influenciado por mis apetencias personales y el momento en el que vea una película, no por el estreno o actualidad de las cintas. No obstante, aceptaré sugerencias, ya que lo que mejor ha funcionado siempre en este mundillo es el boca a boca. Así, habrá más críticas de películas de ciencia-ficción, acción, terror o fantástico que de dramas o musicales. Para bien o para mal nací en los 80 y me crié bebiendo de la teta de Spielberg, Carpenter, McTiernan, Cameron y Lucas y eso pasa factura.

Espero que al menos os sirva para descubrir o redescubrir alguna película o simplemente para entreteneros,

Harryhausen.

NO MUERTO de Pablo Sánchez Blasco. ESTRENADO EN EL FESTIVAL DE GIJÓN!!!